En la playa de ilusoria visión
corre un aire amoroso,
tu cuerpo danza con el viento
la mente trabaja el poema.
El viento busca la miel
de tus sonrientes labios,
la arena blanca acaricia
lo fértil de tu piel bronceada.
Tu piel es el aroma encantado
de una abeja en el panal,
el agua cristalina de la mar
circunda tu cuerpo dibujado.
A un ritmo encadenado,
las olas alucinan los ojos
de la juventud con el efímero
paso de los pensamientos.
Aguas penetrantes
de armonía y lucidez,
en la blanca arena del alma
escucho el deleite de tu ser.
Por Luis I. Rodríguez
Belleza inigualable, de aguas transparentes y cristalinas, bajo el engalanado cielo azul.Envidia sana da verla, con el día que llevamos en Galicia...agua, lluvia y viento...
ResponderEliminarSaludos fraternos amigo.