Estréchame entre tus manos,
sienta palpitar un corazón apasionado,
tu luz aromada se pierde en un suspiro,
tus besos ardientes enloquecen el espíritu
en la cima del vacío, una ola de amor.
Estréchame entre tus manos,
escucha la vibración del pensamiento vivaz
que aparta los escombros deteriorados del viejo amor,
ocultando en una brisa pasajera cerca del panal,
el encuentro anhelado de un tierno amor.
Estréchame entre tus manos,
aparta el tormentoso frío de la indiferencia humana,
calma tu sed con la miel de mis labios y
sonría cual náufrago en la arena,
oyendo la melodía encantada en el manantial.
Estréchame entre tus manos,
recorra con tu sonrisa mi ondulada desnudez
temblando de pasión se escucha una melodía,
floreciendo en el jardín yace
un verso encantado por tu amor.
Estréchame entre tus manos,
mira tu cuerpo unido al mío
como el penetrante aroma de una flor encendida
clamando de sí, admiración y asombro
del encantador de amor.
Por Luis I. Rodríguez
sienta palpitar un corazón apasionado,
tu luz aromada se pierde en un suspiro,
tus besos ardientes enloquecen el espíritu
en la cima del vacío, una ola de amor.
Estréchame entre tus manos,
escucha la vibración del pensamiento vivaz
que aparta los escombros deteriorados del viejo amor,
ocultando en una brisa pasajera cerca del panal,
el encuentro anhelado de un tierno amor.
Estréchame entre tus manos,
aparta el tormentoso frío de la indiferencia humana,
calma tu sed con la miel de mis labios y
sonría cual náufrago en la arena,
oyendo la melodía encantada en el manantial.
Estréchame entre tus manos,
recorra con tu sonrisa mi ondulada desnudez
temblando de pasión se escucha una melodía,
floreciendo en el jardín yace
un verso encantado por tu amor.
Estréchame entre tus manos,
mira tu cuerpo unido al mío
como el penetrante aroma de una flor encendida
clamando de sí, admiración y asombro
del encantador de amor.
Por Luis I. Rodríguez
No hay comentarios:
Publicar un comentario